En el Jardín Infantil Casita del Sol durante el año escolar realizamos dos encuentros con nuestros padres de familia, con el fin de estar cerca de ellos y brindarles herramientas para fortalecer la formación de sus hij@s.

El pasado 21 y 22 de agosto se llevó a cabo el segundo encuentro de Escuela de Padres y Madres de los Grados Prejardín y Jardín. El tema del cual se hablo fue: DIALOGAR SIN PELEAR, ya que la vida conyugal representa una de las oportunidades más maravillosas de las que puede disfrutar un ser humano. En la pareja encontramos nuestro complemento indispensable (sin el cual no estamos completos), y ella o él nos brinda la posibilidad para satisfacer nuestras más profundas y vitales necesidades, tales como el ser amado, el constituir una familia, el madurar en la mutua asunción de responsabilidades, el tener un futuro y un sueño común y por tanto, un sentido de vida.
No obstante, la vida conyugal puede convertirse en un desastre y en un fracaso, dado que está permanentemente amenazada y puede arruinarse por la infidelidad, por la mentira, por la monotonía, por la irresponsabilidad, por el conflicto y la violencia. En este encuentro, deseamos abordar una de estas grandes amenazas que deterioran enormemente la estabilidad y la armonía de la pareja y que de volverse una constante, arruina cualquier matrimonio y familia. Esta amenaza son las peleas entre las parejas, que muchas veces se convierten en una batalla campal de insultos, acusaciones, reproches y violencia. Convivir con otra persona de manera tan estrecha e íntima genera conflictos y roces, los cuales se hacen más intensos y graves si una o ambas personas asumen conductas inadecuadas, incorrectas, deshonestas o inmorales.
Cuando en una pareja el comportamiento de uno o ambos miembros alcanza un grado muy lesivo para el otro, los conflictos se tornan cada vez más álgidos y peligrosos. Para evitar que esto ocurra y que las parejas se desgasten en peleas infructíferas, los invitamos hoy a reflexionar sobre el arte de dialogar sobre los problemas, sin caer en las peleas.
Existe una clara diferencia entre dialogar y pelear. Dialogar implica racionalidad, sensatez y madurez entre dos personas que buscan comprender sus diferencias y preservar la unión y la armonía de la familia. En las peleas es frecuente que no se produzca ningún aprendizaje y que cada uno exprese de manera impulsiva y muchas veces ofensiva e hiriente sus impresiones, justificaciones, sentimientos y resentimientos. La pelea constante acaba el amor y destruye la familia, razón por la cual, como punto de partida, invitamos a reducir las situaciones de pelea en la pareja, fruto usualmente del enojo, el descontrol, el estrés, la angustia, la saturación y el mal genio, y asumir una actitud más serena y sensata, que nos permita escuchar al otro antes de caer en conflictos, agresiones o violencia.
Con el ánimo de romper el hielo entre los asistentes y como marco para la reflexión, invitamos a jugar a padres y madres a la “dinámica del foso” ( the pit), actividad dónde una pareja toma un lazo de extremos opuestos (mujer a un lado, hombre al otro) y lo halan con fuerza arrastrando al contrincante hasta hacerlo caer en el foso. La dinámica ilustra el comportamiento irracional, egoísta y dominante en el que incurrimos cuando peleamos con nuestra pareja sin dialogar.
En la Casita del Sol creemos firmemente que los Padres de familia son los primeros educadores de sus hij@s, es por ello que promovemos estos espacios con el objetivo que sean de crecimiento para tod@s.


















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